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La tormenta tropical Melissa paraliza el deporte dominicano

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La tormenta tropical Melissa, que se intensificó rápidamente hasta convertirse en un huracán de categoría 5, ha causado importantes interrupciones en el ámbito deportivo de la República Dominicana. Desde su paso por el Caribe, la tormenta ha provocado lluvias intensas, inundaciones y fuertes vientos, afectando tanto la realización de eventos deportivos como los entrenamientos de atletas en varias provincias del país.

Uno de los deportes más afectados ha sido el béisbol. La Liga Dominicana de Béisbol (LIDOM) decidió suspender el partido entre los Toros del Este y los Tigres del Licey, programado para el 27 de octubre, debido a las condiciones climáticas adversas provocadas por Melissa. En total, 18 encuentros han sido pospuestos, lo que genera un retraso en la programación de la temporada y complica la preparación de los equipos.

Además del béisbol, otras disciplinas deportivas también han sufrido interrupciones. Atletas de alto rendimiento, como taekwondoístas y ciclistas, han visto detenidos sus entrenamientos debido a las lluvias intensas y las alertas meteorológicas emitidas por el Instituto Dominicano de Meteorología (Indomet). Las condiciones adversas han dificultado el acceso a instalaciones deportivas y la realización de actividades al aire libre.

La infraestructura deportiva tampoco ha salido ilesa. Estadios, canchas y gimnasios han sufrido inundaciones y daños estructurales provocados por los fuertes vientos y lluvias, complicando la reanudación de competencias y entrenamientos en varias regiones. Las autoridades deportivas han anunciado que trabajarán en planes de reparación para garantizar que las actividades puedan retomarse una vez que el clima mejore.

Se espera que, tras el paso de Melissa, las ligas y federaciones deportivas reprogramen los eventos suspendidos y continúen con los entrenamientos de los atletas. Sin embargo, el impacto de la tormenta pone de relieve la vulnerabilidad de la infraestructura deportiva dominicana frente a fenómenos climáticos extremos.